Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

domingo, 22 de diciembre de 2013

LOTERÍA.

A pesar de saber que las probabilidades estadíticas lo rebasaban en progresiones excesivas que marcaban a cualquiera como a un casi seguro perdedor. Juan Alberto sabía que algún día ganaría el premio mayor. Para comenzar, él no era cualquiera. A través de su vida había ido venciendo adversidades por el simple hecho de contar con la fe y la persistencia necesaria para obtener resultados positivos. Le quedaba el pendiente de alcanzar la riqueza, y de su campo profesional, aunque tenía un salario digno, no se podia esperar que le diera una fortuna. Incluso se había programado a no caer en la mala administración y dispendios que cometen la mayoría de los ganadores. Ni tampoco sería víctima del infarto por el desborde emocional de ganar, todo previamente calculado anticipó mantenerse sereno y a lo más dar una media sonrisa como la de la Mona Lisa, y seguir adelante con su existencia libre de ir a cualquier sitio a comer o a viajar y además manteniendo su triunfo en absoluto secreto, ayudaría anónimamente a seres queridos pero no los convertiría en sus parásitos, ni se volvería blanco de envidias o candidato a secuestros en su familia. El día en que cobró los millones vió con satisfacción que cumplió con todas sus esperanzas. Lo más que comentó a su esposa fué la siguiente pregunta.---¿Sabes lo que me preocupa el día de hoy?--- ---¿Qué?--- dijo ella. El respondió: ---Nada.--

6 comentarios:

Dyhego dijo...

Cuando se tiene "todo" hay que buscarse nuevos motivos para seguir viviendo, ¿no?
Salu2 totales.

Unknown dijo...

De acuerdo Dyhego.
Ésta se nos presenta como el tipo de historia que apenas comienza.
En cine un protagonist así tendría a los espectadores cómplices del secreto y le veríamos equilibrando injusticias y pasándola bomba.
Una especie de sabio archimillonario a quien a lavez vemos enriquecer por lo de "dinero llama a dinero."

Ricardo Miñana dijo...

Te dejo un abrazo con mis mejores deseos de felicidad, que disfrutes las fiestas con tus familiares, feliz Navidad!!, feliz año 2014!!.

Unknown dijo...

Gracias Ricardo igualmente te deseamos las mejores Navidades y un fabuloso 2014.
Extiendo ésta felicitación a todos los amigos y lectores y al resto de la humanidad que mejoren.
Empiecen por trabajar en su plan de avance y cumplirlo.
La historia está plena de crisis que se han remontado.
Los japoneses, los chinos, y tantos más que accionaron para surgir del fondo.

bixen dijo...

Si jugases tantas veces la lotería a un número, como distintos de ellos tiene, lo más probable es que nunca te tocaría el Gordo.
No hace falta saber Matemáticas. Imagina que somos el mismo número de amigos y no hay comisión; pero siempre habrá varios que ganen dos o más veces.

"Lo mejor de la fama es saludar a alguien sin temor a equivocarme".

Anónimo, porque no recuerdo.

Juan Esteban Bassagaisteguy dijo...

Muy bueno, Carlos.
Saludos.

Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.