Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

viernes, 4 de febrero de 2011

Destino nominal

Ni alta ni baja. El tamaño justo para quedar siempre oculta en las fotos de grupo. Morena. Pero ni de lejos como el ideal hispano de Julio Romero de Torres. Sus ojos claros podrían considerarse atractivos si no se ocultasen tras unas gafas de gruesos cristales. No fuma, pero el café acabó con el esmalte de sus dientes. Siempre viste con vaqueros (hay quien duda de que debajo de ellos tenga dos piernas), camisa ancha y jersey de cuello vuelto en invierno.  Se llama María. A secas. Bueno, para ser justos hay que decir que, como todos, también tiene apellidos. García Pérez.
 

7 comentarios:

Sergio DS dijo...

María es un precioso nombre, como muchas de las cosas que parece ocultar. El resto, son aderezos.

artistalight dijo...

La belleza va por dentro no? al menos éso nos gusta pensar a las feitas :) De todos modos me agrada María García Pérez.

Unknown dijo...

Al gran micro que escribiste le has otorgado un título genialmente apropiado.
Enhorabuena Puck

Sandra Montelpare dijo...

Coincido PATRICIA! el título es genial!! clap clappp Puck

Anita Dinamita dijo...

Me encanta... como un nombre nos hace parecer lo que seguro, no somos
Como yo "Anita Dinamita" ja ja
Abrazos Puck

Unknown dijo...

Genialmente descrita. La desnudaste sin quitarle la ropa.
Y viéndola así sorprende a más de uno.

Puck dijo...

Sergio, el nombre es precioso y, la verdad, cada vez menos común

Artistalight, me gusta que le hayáis cogido cariño a María

Patricia, Sandra, ¿no os ha pasado alguna vez que al oir el nombre de alguien pensaís que había nacido para lo que está haciendo? Es el destino

Anita, no lo niegues, eres pura dinamita, no hace falta mas que leerte jeje

Carlos, me ha gustado mucho eso de "desnudarla sin quitarla la ropa", gracias

Saludillos a todos

Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.