Daniel Galantz es un fantástico humorista gráfico que los que siguen este blog ya conocerán. Para los que no lo conozcan recomiendo que visitéis su blog GALANTZ.

Pues bien, cual fue mi sorpresa cuando hace unos días abrí mi correo y vi un mensaje suyo en el que me enviaba un bonito diseño para El Microrrelatista. Me gustó mucho y es el que podéis ver en la cabecera de esta página.

¡Gracias Daniel!

jueves, 29 de septiembre de 2016

Adaptación. David Moreno Sanz

 
Adaptación

Segunda noche. Aún alza la vista hacia el umbral de la puerta pero pronto se distrae con la montaña de juguetes que hemos colocado a su lado. Ya casi ni llora. Seguro que a la tercera no recordará a la mujer de ojos brillantes y sonrisa estúpidamente feliz del parque.
Autor: David Moreno (No commets)

miércoles, 28 de septiembre de 2016

La sombra del perdón

  
La sombra del perdón

Con el apagón, pudieron hablar de todo lo que había erosionado su relación, pero cuando iban a pedirse perdón, volvió la luz.

Autor: C.D.G
Blog: Historias de nadie

martes, 27 de septiembre de 2016

Ciclo de lavado


Ciclo de lavado 

María saca la ropa de la lavadora, la tiende en las cuerdas del patio, en el extremo está María que recoge las prendas secas y las lleva al cesto de mimbre donde está María, que las plancha, las dobla y las traslada al dormitorio donde está María haciendo el amor con su marido, que insatisfecha se dirige al cuarto de aseo donde está María bañando a los niños, que recoge la ropa sucia y la acarrea a la cocina donde está María, que deja de guisar para portarla a la terraza donde está María, que la introduce en la lavadora.

Autor: Ximens
Blog: Montesdetoledo
Pintura: "Colgando la ropa" de Berthe Morisot
 

lunes, 26 de septiembre de 2016

Malos hábitos


Malos hábitos

Había decidido dejar de fumar pero, para hacerlo, debía crear la atmósfera necesaria. Una gran nube que le recordase sus malos humos, las lágrimas que había escondido tras el consabido “me ha entrado algo en un ojo”. Los momentos de charla y risas. El cigarrillo de después, el de antes… Cuando consiguió condensar todo aquello en una compacta nube, la ató por un extremo y la colocó, como un gran globo, en las ramas secas del árbol que no había plantado. Ahora sólo le quedaba comerse a sus hijos y borrar el libro que parpadeaba en la pantalla del ordenador.

Autora: Rosa Martínez
Blog: Van al aire

domingo, 25 de septiembre de 2016

Llovizna. Pedro Sánchez Negreira


LLovizna


Llovía y las gotas golpeaban con ritmo silente el cristal de la ventana. Aquí siempre llueve, siempre igual. Mientras esperaba a Julia, sentado en la cocina, pensé en que quizás fuera esta lluvia –que dura de octubre a octubre– la que hizo florecer nuestra amargura. La esperaba porque debíamos hablar; necesitaba decirle que no podía más, que lo mejor –para los dos– sería separarnos y que esta vez no habría una nueva oportunidad. Sé que el final llegó mucho antes de que me atreviera a confesárselo, antes de darme cuenta de que aquí las nubes nos acarician los hombros. Durante demasiado tiempo le eché la culpa a la grisura que nos envuelve, al ruido del frío que nos rodea, porque me costaba aceptar que fuésemos ella y yo los únicos responsables de nuestros orgasmos tórpidos, de nuestras calmas con púas, de nuestros silencios desportillados, de nuestras caricias inanes. Pero ya no podía recordar por qué seguía a su lado. Demasiados años sintiendo, siempre, que algo me faltaba. Confesándoselo y notando que ella lo oía como quién oye llover. Había decidido marcharme esa noche. Prefería estar solo a soportar la tristeza que me calaba a su lado, pero temí que la verdad se me atragantara como granizo en la garganta. No quise herirla y le mentí. «Estoy enamorado de otra» le dije. 

Autor: Pedro Sánchez Negreira
Blog: Entre nunca y quién sabe

sábado, 24 de septiembre de 2016

Contigo, pan y cebolla


Contigo, pan y cebolla

Estaba enamorado, ¿cómo no reír ante aquel plato de lentejas carbonizadas?
"Con el tiempo aprenderá a cocinar", pensaba yo con esa bendita ingenuidad de recién casado.
Pero han pasado diez años y de aquel amor sólo quedan las cenizas y un inconfundible olor a chamusquina.

Autora: MJ

viernes, 23 de septiembre de 2016

Separaciones que no

  Separaciones que no

Pedrito está contento, porque le encanta el chocolate con picatostes, haga quien lo haga. Adela no lo tiene tan claro, hizo hace poco la comunión y de vez en cuando, aunque le gusten las visitas, se pregunta si debe confesarse. En cuanto a mí, la mayor, soy quien tiene la peor parte; por un lado, he de contestar a las preguntas que me hace madre sobre padre y su nueva vida; por otro, he de lograr que padre inicie esa nueva vida y deje de pensar en su mujer que está, aunque no lo haya admitido todavía, muerta y enterrada. 

Autora: Luisa Hurtado González
Blog: Microrrelatos al por mayor
Ilustración:  Snezhana Soosh

jueves, 22 de septiembre de 2016

La Claraboya


La Claraboya

La habitación estaba en el último piso.Esta tenía un techo bajito y el padre no había tenido mejor idea que colocar una claraboya en él para que el sol las iluminara durante el amanecer, lo que no consideró eran las noches y los monstruos que apoyaban la cara en el vidrio y se pasaban horas observándolas con lujuria.Todas las mañanas la claraboya era limpiada porque el rocío dejaba unos dibujos extraños, en realidad el líquido era el residuo de la actividad onanista de los visitantes, y los dibujos: tan sólo las patitas patinando en sus mismos fluidos.

Autora: Diana (Escarcha) 

Blog: Sombras

miércoles, 21 de septiembre de 2016

Amor light

  
Amor light

Sin deshojar margaritas. Sin música de fondo. Sin hacer manitas. Conectados por un programa informático, hemos quedado en un chat sin videocámara. Sin faja y sin maquillaje, iré con gafas de pasta y pijama de franela. Una cita sin complicaciones ni mariposas en el estómago, que engordan.

Autora: Mar González (Puck)
Blog: Los jardines de Puck 
Imagen de la Red

martes, 20 de septiembre de 2016

Ni la muerte nos separe. Miguel Ángel Pegarz


Ni la muerte nos separe

Como sombras disipadas por un nuevo amanecer, las dos almas se escabullen a toda prisa con los primeros rayos de sol. Atrás dejan una noche amándose bajo los matojos, ocultos a los ojos de todos con la complicidad de la luna. Atrás dejan también sus cuerpos apuñalados, aún tibios.

Autor: Miguel Ángel Pegarz

Blog: La guarida del Coyote
Fotografía: Brumas en un campo al amanecer

lunes, 19 de septiembre de 2016

A la hora señalada. Lola Sanabria


A la hora señalada

Hace rato que cantó el gallo y no consigo despertarme. Lo oigo subir por la calle. Cada vez más cerca, el cortejo fúnebre.



Autora: Lola Sanabria.

Blog: Lola Sanabria. En pequeñas dosis
Pintura: "Amanecer en el campo" de Claudia Kunze

domingo, 18 de septiembre de 2016

Cruces. Toro Salvaje

 Cruces

Cruz tras cruz 
mi corazón parece
un cementerio
de locas ilusiones
esperanzas rotas
y ridículos sueños.

Autor: Toro Salvaje.
Blog: Toro Salvaje
Pintura: "El  corazón y el ser" de Cristina Alejos

sábado, 10 de septiembre de 2016

El Microrrelatista resurgirá en breve.

 

Dentro de pocos días se irán publicando en este espacio microrrelatos de distintos escritores, seleccionados de entre tantos que habitan por la blogosfera.

Por distintas circunstancias en mi vida dejé abandonado este blog durante mucho tiempo, pero lo dejé vivir y gracias a la colaboración de los amigos que en el han ido publicando, ha durado hasta el año 2015,

En esta nueva etapa El Microrrelatista dejará de ser un blog colectivo.

Pido disculpas a los escritores y lectores y espero que poco a poco este lugar se convierta en un referente para los amantes del microrrelato.

Estén atentos.

Un saludo

Torcuato González Toval.

Ilustración: Sophie Dutertre



Decálogo para escribir microcuentos (Robado de la Escuela de escritores)


1. Un microcuento es una historia mínima que no necesita más que unas pocas líneas para ser contada, y no el resumen de un cuento más largo.

2. Un microcuento no es una anécdota, ni una greguería, ni una ocurrencia. Como todos los relatos, el microcuento tiene planteamiento, nudo y desenlace y su objetivo es contar un cambio, cómo se resuelve el conflicto que se plantea en las primeras líneas.

3. Habitualmente el periodo de tiempo que se cuente será pequeño. Es decir, no transcurrirá mucho tiempo entre el principio y el final de la historia.

4. Conviene evitar la proliferación de personajes. Por lo general, para un microcuento tres personajes ya son multitud.

5. El microcuento suele suceder en un solo escenario, dos a lo sumo. Son raros los microcuentos con escenarios múltiples.

6. Para evitar alargarnos en la presentación y descripción de espacios y personajes, es aconsejable seleccionar bien los detalles con los que serán descritos. Un detalle bien elegido puede decirlo todo.

7. Un microcuento es, sobre todo, un ejercicio de precisión en el contar y en el uso del lenguaje. Es muy importante seleccionar drásticamente lo que se cuenta (y también lo que no se cuenta), y encontrar las palabras justas que lo cuenten mejor. Por esta razón, en un microcuento el título es esencial: no ha de ser superfluo, es bueno que entre a formar parte de la historia y, con una extensión mínima, ha de desvelar algo importante.

8. Pese a su reducida extensión y a lo mínimo del suceso que narran, los microcuentos suelen tener un significado de orden superior. Es decir cuentan algo muy pequeño, pero que tiene un significado muy grande.

9. Es muy conveniente evitar las descripciones abstractas, las explicaciones, los juicios de valor y nunca hay que tratar de convencer al lector de lo que tiene que sentir. Contar cuentos es pintar con palabras, dibujar las escenas ante los ojos del lector para que este pueda conmoverse (o no) con ellas.

10. Piensa distinto, no te conformes, huye de los tópicos. Uno no escribe (ni microcuentos ni nada) para contar lo que ya se ha dicho mil veces.


Envía tus microrrelatos de no más de 200 palabras a elmicrorrelatista@gmail.com. Se irán publicando los mejores.